¿Qué es el cold brew?
El cold brew es una técnica que consiste en infusionar las hojas de té o hierbas en agua fría durante varias horas, normalmente entre 6 y 12 horas. Este proceso lento y en frío permite extraer los sabores y beneficios de manera más suave y natural, evitando el amargor y el exceso de taninos que se pueden producir al hacer una infusión con agua caliente.
¿En qué se diferencia del té o infusión fría?
Una infusión fría o té frío se prepara primero con agua caliente, y luego se deja enfriar o se añade hielo. Esta manera es más rápida pero puede generar un sabor más intenso y, a veces, más amargo. En cambio, el cold brew ofrece una experiencia más equilibrada, con un sabor fresco y suave que lo hace ideal para el verano, además de conservar mejor algunos antioxidantes y nutrientes.
¿Por qué probar el cold brew este verano?
El cold brew es una forma refrescante y saludable de mantenerse hidratado y disfrutar del sabor natural del té y las infusiones. Además, prepararlo en casa es muy sencillo y puedes experimentar con diferentes variedades y combinaciones.
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